jueves, 29 de octubre de 2009

Un Buen Ejemplo y un Consejo

El pasado miércoles 21 de Octubre tuve la oportunidad de ir a un concierto que me llenó de alegría. Fue la Gala Anual de la Filarmónica de las Américas, en la sala de conciertos Frederick P. Rose del complejo artístico del Lincoln Center en Nueva York. El programa fue ligero e incluyó piezas de Piazzolla, Bernstein y Stravisnky, entre otros. Lo interesante fue que la Filarmónica de las Américas fue dirigida por su fundadora y directora artística, la mexicana Alondra de la Parra. No sólo sorprende el hecho de que ha sid0 la única mexicana en dirigir una orquesta en Nueva York, sino que actualmente tiene sólo 28 años.

Aparte de dirigir a “su orquesta” la joven señora de la Parra ha dirigido a las sinfónicas de Houston, Phoenix, Columbus, San Antonio, Dallas, Los Ángeles (de cámara), Buenos Aires, Montevideo, Singapur , así como las del Estado de México, Xalapa, Aguascalientes y a la Sinfónica Nacional de México. Para cerrar su curriculum, también ha dirigido a Plácido Domingo en la Ópera de Washington.

Después del concierto tuve la oportunidad de hablar brevemente con Alondra y me dejó una gran impresión. Es una mujer de una sencillez extraordinaria y de un liderazgo indiscutible. No hay director musical que no sea apasionado y esa pasión es la que la ha llevado a alcanzar lo que ningún otro músico mexicano ha logrado, ya no digamos a su edad, sino en una vida entera.

Sin embargo, su éxito no ha sido necesariamente un paseo por el parque. Se le critica que Emilio Azcárraga Jean sea su mecenas. Escuché un comentario –claro, de otro mexicano- que decía que con el dinero de Azcárraga, cualquiera montaba una filarmónica. Como soy proclive a la discusión, y disfruto convertirme en abogado de causas ajenas, le respondí al joven de rápidas y triviales conclusiones que no sólo era una falta de reconocimiento al talento de la señora de la Parra, sino una flagrante (palabra de abogado) acusación de idiotez en contra de Azcárraga, a quien no tengo el gusto de conocer y con quien no necesariamente simpatizo todo el tiempo, pero que con lo que he leído y escuchado, es todo menos retrasado para tirar algunos millones de dólares en una causa que no valga la pena. Pura envidia, sin duda.

Yo me quedo con la buena imagen del concierto y del orgullo que sentí cuando vi a esta joven conductora dirigir a su orquesta. Fue como ver a Lorena Ochoa, o a nuestros futbolistas en Europa: gente que está en la cima de lo que su profesión les permite, o muy cerca de ella.

Sin embargo, nuestros máximos representantes nacionales en la cultura y en los deportes, pertenecen a un segmento profesional que en México no tiene apoyo. Y ya todos estarán pensando que sí, que aquí no se apoya a los deportistas y a los artistas. Lo triste es que muchos de estos jóvenes con todo el potencial, ven truncadas sus vocaciones no en una oficina de la Conade o del INBA, sino en sus propias casas. La falta de recursos es la causa más recurrente, pero en hogares de clase media y alta existe una ceguera sistemática en contra de estas actividades y es ahí en donde se quedan la mayoría de las de la Parra, Ochoa, Márquez y otros que en el mejor de los casos, tendrán la oportunidad de ir a la universidad. Creo que no hay nada más frustrante en la existencia de una persona que vivir con la idea de que se pudo ser algo más, y peor aún, que podría haber sido el mejor en eso que no se le permitió hacer. Papás: si sus niños y jóvenes tienen un destello de estos talentos, apóyenlos y permítanles explorar su potencial. Si tienen lo que se necesita para llegar a la cima, créanme que en esos segmentos sí llega la fortuna pronto. Si a fuerza hay que dejar el deporte y el arte para ir a la universidad, por lo menos oblíguenlos a ser ingenieros, que es lo que el país necesita. Esto lo dice su servidor, un pobre contador público. Hasta la próxima semana.

pesquera@gmail.com

jueves, 22 de octubre de 2009

Jarabito Para una Neumonía

Perdón por saturarlos con el tema del Presupuesto. Sé que estos días no ha habido otro tema en los medios pero lo que está pasando en el Congreso es importante por múltiples razones y no quiero dejar de resaltar algunos puntos.

Primero, la aprobación del Presupuesto que salió ayer miércoles por la madrugada confirma el nuevo balance de poder en el que el PRI trae el sartén por el mango. Aunque tuvieron que cabildear, lo hicieron más por guardar las formas y por mostrar voluntad de diálogo que por necesidad.

Segundo el PAN está perdido y no tuvo más que apechugar. Escuché por la radio una entrevista a Josefina Vázquez Mota y por su voz, me la imagine desencajada, con la lagrimita a punto de salirle y con la voz de Verónica Castro en Los Ricos También Lloran: “Lamentablemente, no nos alcanzaron los votos…”. No les alcanzaron los votos para cobrarnos más impuestos de otra manera.

Tercero, algunos diputados del PRI, del PAN y del Verde no se alinearon con el voto de la manada. Tal vez la compaña “Mi Voto Por Tu Compromiso” está dando resultados.

Cuarto, si el PAN está perdido, la izquierda ya no es más que una idea, no tiene materia. Con las personas que la dirigen, o dicen dirigir, no tienen presente ni futuro. No existen, no articulan, están acéfalos. No tienen relevancia alguna en el plano nacional y nos están costando una fortuna. Con lo gordo que me cae, pero cómo extraño a Cuauhtémoc Cárdenas, izquierdista aguerrido pero al final un caballero.

Quinto, nuevamente las personas y las empresas del país no importamos para nada. Los legisladores vuelven a mostrar su ignorancia como grupo al no entender que para recaudar más, México necesita ampliar su base y aumentar la productividad. Desde luego que la palabra productividad no está en el léxico de los legisladores, así que la opción fácil -de dos más dos- fue cobrarnos más impuestos a los pocos que ya pagábamos algo. Me pregunto si algún día será posible hacer obligatorio un curso de micro y macro economía, no a todos los Diputados pues sería como arrojar perlas a ya saben quienes, pero por lo menos a los de las comisiones de Presupuesto y Hacienda.

Sexto, con este presupuesto México pierde competitividad internacional. Nadie quiere invertir en un país que se hace más caro y eso es lo que acabamos de hacer. Esperemos ver qué dicen las calificadoras, pero por lo pronto las notas en los principales periódicos financieros de Estados Unidos y Europa no ven bien las cosas.

Séptimo, me asombra ver cómo los Diputados se esfuerzan cada día más por entregarnos menos. Y digo que se esfuerzan porque verdaderamente les cuesta trabajo entregarnos una miseria de resultados legislativos año tras año.

Estamos bajos en productividad, en recaudación, en aplicación de la Ley, tenemos impuestos caros y complejos, nos estamos quedando sin remesas ni petróleo y además somos un país peligroso.

La única ventaja que nos está quedando como país es la cercanía con Estados Unidos y seguro ya hay algunos legisladores que están pensando en también poner un muro de nuestro lado. No vaya a ser que el que están poniendo los gringos deje un hueco para que llegue algo bueno a México de aquel lado.

La semana entrante, les tengo una nota más agradable para que se nos pase el coraje, ahora un tecito por favor.

pesquera@gmail.com

La Opción Militar en los Municipios

Se dice que en el mundo hay tres maneras de hacer las cosas: de la forma buena, de la forma mala y de la forma del ejército. Los militares de carrera no han tenido la misma formación que tuvimos el resto de los ciudadanos, pues crecieron en un entorno de trabajo, disciplina y orden que los civiles desconocemos. Estas diferencias cualitativas respecto al resto de la población del país les ha valido ser la punta de lanza en la lucha contra el crimen organizado en México.

Se ha hablado mucho en los últimos tres años sobre la conveniencia o no de que el Ejército Mexicano patrulle algunas zonas del país. Hay defensores de los derechos humanos y políticos de todas las corrientes que se oponen rotundamente a esta medida. Yo les digo, sin meternos en aguas muy profundas, que están mal. El Ejército era la única opción para enfrentar al crimen organizado en México. Con policías poco educados, corruptos y sin entrenamiento ni equipo adecuados, nuestro país se estaba convirtiendo en tierra de nadie.

Que los militares han cometido abusos, si, pero no más de los que han cometido las policías municipales, estatales y federales en su gris historia en México. Que tienen desertores, también, como los hay en la PFP en la SIEDO y en la PGR. Pero a pesar de sus tropiezos, creo que nadie podrá negar que hoy por hoy, el Ejército Mexicano y las Fuerzas Armadas son las instituciones más honorables del país.

Hay muchos factores por los que un militar está mejor capacitado para ser Secretario de Seguridad Pública de un municipio grande que un civil en estos días. Muchos de los civiles que han ocupado estos puestos en el pasado son prominentes abogados o policías que, arriesgando sus vidas y prestigio, han tratado de combatir al crimen en nuestras ciudades con herramientas –personales y materiales- muy limitadas a su disposición. El problema ahora es que los delitos de nuestros días no son sobre el asalto a un Oxxo, una pelea callejera, el robo de propiedad en un casa o incluso delitos más graves como violaciones y homicidios. El reto es cómo mantener una ciudad grande segura con delincuentes que llevan granadas, rifles de asalto y que tienen entrenamiento militar, no policiaco.

Los militares que ahora ocupan varias Secretarías de Seguridad Pública en algunos municipios del país no son solo gente vestida de verde, con el pelo corto y malhumorados. Son gente que conoce de historia y que han leído a Clausewitz, Hobbes, Keegan, Mao y a los más importantes autores de teoría militar reciente y antigua. Todos saben la diferencia entre estrategia y táctica y muchos de ellos han tomado cursos sobre guerra limitada y conflictos de baja intensidad, que es lo que estamos viviendo en México. No se puede enfrentar al crimen organizado con estrategias policiacas diseñadas para combatir asaltos a transeúntes y robos de coches.

Nos guste o no, el tener a los militares en las calles y ahora en cargos públicos es la opción menos mala entre un montón de opciones que créanmelo, no quisiéramos ni considerar.

Siguiendo la tradición de honor que les caracteriza, éstos militares asumen que están bajo el mando de autoridades civiles, que su trabajo es temporal y sus servicios serán necesarios en lo que sus conocimientos le permiten a nuestras ciudades salir delante de este desafío que se ha presentado. Para ellos sí, La Patria es primero.

jueves, 8 de octubre de 2009

Sueños de Grandeza


En un una serie de brillantes ensayos escritos en los años veinte –época de enorme miseria en España- y adelantándose por lo menos quince años a su época, José Ortega y Gasset vio con claridad las condiciones para la guerra civil, el ascenso de la extrema derecha en España y el brote del autoritarismo y del fascismo en Europa. Tuvo la visón de un panorama desolador y se le cumplió. Sin embargo, a la caída de la dictadura y después de un período de transición muy complicado, los españoles pudieron ponerse de acuerdo para sacar al país adelante. Todo gracias a un grupo de políticos-estadistas que en 1977 decidieron pactar las condiciones para sacar de la miseria a España.

La generación de españoles nacida en los setenta creció en un país pobre, pero viable, con futuro. Y lo más importante: las generaciones que están tomando y tomarán las riendas del país ahora y en unos años más, son gente que creció con actitud ganadora.

A pesar de la reciente crisis mundial, que dejará en España una tasa de desempleo de casi 20% para este año, el país sigue siendo próspero. Claro que tienen problemas, como los Canadienses, Suecos y Australianos, pero sus problemas son más o menos los que tenía López Portillo: administrar la abundancia y, sin duda, en unos años se pondrían en pie de nuevo. Desde hace unos treinta años decidieron dejar atrás a un país hundido en la miseria y el encono.

En cambio, en América Latina, de acuerdo a datos de la UNCTAD, las personas nacidas en los últimos 40 años en nuestra región no han podido en promedio superar el ingreso que tenían sus padres. Esto es una tragedia, considerando que los padres de esas generaciones también tenían un ingreso muy bajo. Pero lo verdaderamente desgarrador es que éste hecho describe la desesperanza en la que vivimos en Latinoamérica y específicamente México: esa terrible idea –o realidad- de que todo tiempo pasado fue mejor, que está presente en todos nosotros y, dolorosamente, en nuestros jóvenes.

Recientemente se publicaron datos del Gobierno Federal en los que aceptan que durante los tres años de esta Administración ha aumentado en 6 millones el número de pobres en el país, para un total de 20 millones en pobreza alimentaria. La definición de la ONU para “pobreza alimentaria” aplica para aquellas personas que viven –o sobreviven- con menos de un dólar al día, o dicho de otra manera, que literalmente están muriendo de hambre.

El Presidente Calderón perdió el pasado 5 de Julio el control sobre los tres años restantes de su Administración y se ve difícil que pueda hacer algo por esas pobres personas. Ahora nuestros destinos están en manos del Congreso y honestamente, no creo que vayamos a mejorar mucho.

De los 500 diputados que hay la Cámara Baja, si acaso 30 legisladores controlan los destinos del país y sus sueños son sobre poder y engrandecimiento personal. Los otros 470 señores y señoras están para levantar la mano cuando se los ordenen.

Hoy veo a Brasil creciendo, pujante, a Petrobras en la cima de las empresas petroleras del mundo, a Embraer como líder en el sector aeroespacial, a sus científicos orgullosos de la mayor industria de eco-combustibles en el planeta. Y Río de Janeiro como sede para los Juegos Olímpicos de 2016 es el premio a su esfuerzo. Todos fueron sueños de grandeza algún día, hoy son realidades.

Permítanme adaptar la famosa frase de Camilo José Cela, otro célebre español: no sé si estamos dormidos o durmiendo, pero lo seguro es que estamos jodidos y nos siguen jodiendo. Dulces sueños.

pesquera@gmail.com

jueves, 1 de octubre de 2009

A ver si es cierto...

Pues el PRI ahora sí está que no se la cree. Después de las elecciones del pasado Julio en las que recuperó los espacios perdidos en el 2000, acabó por convertirse -en complicidad con los mercenarios del Verde- en el dueño absoluto de la Cámara Baja.

El PRI repartió a su gusto el suculento pastel de las Comisiones de la Cámara de Diputados. Las famosas Comisiones de las que todos escuchamos hablar son equipos de legisladores que tienen la responsabilidad de proponer, revisar, redactar y someter al pleno proyectos de Ley en diferentes sectores de la vida de la Nación. Hay una cuarentena de ellas, desde energía, comunicaciones y hacienda hasta grupos indígenas, derechos humanos, población y deporte. Cada una de estas Comisiones es presidida por un diputado, que es quien coordina los trabajos del equipo.

Para la presente Legislatura, el PRI eligió presidir con el Verde las Comisiones de mayor peso y relevancia y dejó las de relleno y conflictivas al PAN, que salvo las de Hacienda, Energía y Distrito Federal, tendrá poca influencia en los proyectos legislativos decisivos para lo que queda del presente sexenio.

Lo más importante para el PRI es que de la veintena de Comisiones que encabezarán sus diputados, una de ellas es considerada la “Joya de la Corona”: la de presupuesto. Ellos tienen en sus manos la propuesta del Presupuesto de Egresos que mandó el Ejecutivo para el 2010, esto es, el documento que indica cómo, cuándo y en dónde se aplicará el gasto para el año entrante. De la propuesta que mandó el Presidente, ellos y sus secuaces pueden aumentar y disminuir los montos, agregar o eliminar partidas y dirigir o desviar recursos según les convenga. Más claro: ellos firman la chequera del dinero que se gastará en el país para el 2010. Y lo mejor de todo, pueden aprobar todo lo anterior sin tener que derramar una gota de bilis. Cuando los del PAN se pongan flamencos y manoteen sobre la mesa, podrán citar a Carlos Medina y decirles “No se aceleren porque los vamos a mayoritear” o algo por el estilo. Sin duda la vida da vueltas.

La reflexión importante sobre la rebatinga de esta semana en el Congreso tiene que ver con el nuevo balance de poder que se está consolidando en México. Todos los acomodos y negociaciones que vimos esta semana en el Congreso fueron clave para los intereses de los partidos, no para el interés tuyo ni mío. El único interés que despertamos en los políticos es cuando cumplimos dos obligaciones de todo buen ciudadano: cuando pagamos impuestos y cuando votamos.

El poder que acaba de afianzar el PRI en este año será utilizado para llevar mano en la elección del 2012 y aunque su retórica y Lucero nos digan que son más buenos que la Madre Teresa y que sólo viven para servirnos, la verdad es que se estarán sirviendo a sí mismos un banquetón como los de antaño.

Y los del PAN están tristes no porque acaban de perder -hoy en parte y en unos meses posiblemente en su totalidad- la oportunidad de servirnos, de ofrecernos un cambio, mano firme, empleos y seguridad, sino porque les acaban de quitar la chequera y acordémonos que vivir fuera del presupuesto es vivir en el error.

Por lo menos habrá alguien que la pase bien en el Congreso en esta Legislatura. En la Comisión de Relaciones Exteriores habrá happy hour extendida y shots de Courvosier gratis todos los días de 10:00 a.m. a 6:00 p.m. Adivinen quién la presidirá. Pista: es paisano nuestro.